En este momento nos encontramos en una etapa crucial como Iglesia, como cuerpo de Cristo, como embajadores del reino de los cielos aca en la tierra, Dios nos ha dado la bendición, privilegio y responsabilidad de construir casa para El.
Gracias a todos aquellos que se han unido a esta noble causa de avanzar en los propositos que Dios tiene para nosotros.